lunes, 8 de febrero de 2010

Dos leguas Fuente de la Chopera

Otro año más fuimos a las Dos leguas de la Chopera. La carrera no iba ser como la del año pasado en lo que respecta a la climatología, al revés hizo un día perfecto para correr. Y la mentalidad también era diferente, unos porque la mente está puesta en distancias más largas, otros por la inactividad desde las navidades, otros por estar bajos de forma, pero con un objetivo común, rodar, ver sensaciones.
Salimos los tres juntos, casi de los últimos, nuestro ritmo iba a ser lento, pero siendo un ritmo lento era más rápido que el de muchos que salían por delante. Los cuatro primeros kilómetros fuimos juntos, difícil de pasar a nadie ya que los caminos eran estrechos y la gente mucha. Edu empieza a hacer la goma pero nos tiene siempre a la vista, unos 100 metros de distancia. Sobre el kilómetro 6 encontramos un repecho que el año pasado no estaba y que se hizo duro, pero que también hizo una selección importante ayudando a correr más cómodo, los ritmos bajaban de los 5 minutos y Lolo y yo no nos despegábamos. El ritmo por lo menos para mí no estaba mal para ser un rodaje y el terreno acompañaba, era totalmente llano. Pero ya se veía la famosa cuesta del cementerio, corta pero tremendamente dura. Lolo iba muy fino, vi la cara de un niño cuando tiene un chupa-chups y le dije tirase, yo no podría seguir el ritmo del “Niño de las cuestas”. Se nota el parón, recuerdo que el año pasado la subí mejor, o eso me pareció a mí. Cuando llego arriba recupero rápido y empiezo a coger ritmo rápido, bajo de los 5 minutos sin problema y empiezo a pasar a gente desfondada totalmente, buena señal. Lolo en poco más de dos kilómetros me saca dos minutos y medio, esta fino el tío. Edu estuvo viéndome, siempre a unos 400 metros, pero también sufriendo en la cuestecita. Y después de esto espera Fuencarral, con sus subidas habrá que tomárselo con calma.

1 comentario:

  1. Muy buena la crónica, Entorviscao. La carrera estuvo muy bien. Estuve dudando cuando me dijiste que tirase, porque se suponía que iba a terminar contigo, pero al final tiré. Te debo otra más

    ResponderEliminar